Los entrenamientos:
El LUNES fui a caminar-correr 50 minutos y después entrené una hora con el grupo. Estiramos, calentamos, dimos una carrerita y empezamos a hacer sentadillas y demás ejercicios de piernas, mil ejercicios de piernas, culo y cartucheras, ¡mis pobres piernas! Después hicimos abdominales y una carrerita para terminar. ¡El lunes dimos cañita de la buena! Yo creo que la grasa no me abandona porque le pego cada tunda que la tengo acojonadita y del miedo se aferra a mí cuerpo jajajajaja
El MARTES se suspendió el entrenamiento porque se puso a llover así que aproveché y fui una hora a la piscina. He recordado que me encanta nadar. =)
El MIÉRCOLES hice un "puente inventado" y me fui de viaje y por eso no fui a entrenar.
El JUEVES sí hice algo de ejercicio: fui a caminar unos 40 minutos.
El JUEVES sí hice algo de ejercicio: fui a caminar unos 40 minutos.
El VIERNES y el DOMINGO no hice nada de nada... El SÁBADO fui a caminar una horita.
La dieta:
Sigo teniendo vetados muchos alimentos no saludables y/o no recomendables y también sigo controlando las cantidades y demás, pero claro, con el viaje la cosa se complica bastante... No soy yo la que controlo lo que se cocina o no, ni el menú en sí y adapto a lo que hay porque siempre he odiado limitar a los demás por algo que me repercute sólo a mí como es la dieta; y, en realidad, no he hecho la dieta mal, no la he hecho perfecta, pero tampoco me he salido demasiado de la raya; pero aún así, saber que he disminuido el ejercicio y que he empeorado un poquito la alimentación me tiene de los nervios... y no tener la báscula aquí para hacer un control, no saber si voy escapando o si voy fatal me tiene en vilo... Es inevitable bajar la guardia un poco cuando tienes unos días de relax... igual de inevitable que tener remordimientos después =(
Además, esta semana me he sentido bastante agobiada... por lo que comentaba arriba y agobiada también porque me sigue resultando agotador estar pendiente en todo momento de lo que como y lo que tengo que dejar de comer, de cuándo lo como etc. (¡hacer las 5 comidas al día me tiene loca!). y también me agobia tener que "sacar tiempo" siempre para hacer ejercicio... que sé que no cuesta nada, que hay tiempo para todo y que si se quiere se saca el tiempo de donde sea... pero bff... ¡cuesta ganarle la batalla a la pereza!
Hay días que siento que lo llevo bien, hay días que me siento tranquila... pero hay otros días en los que el agobio me puede, que tengo demasiada ansiedad y que se me hace un nudo en la garganta que es imposible desatar y siempre acabo entre lágrimas...
Empecé este reto porque estaba harta de no sentirme feliz conmigo misma... ahora me doy cuenta que en el proceso hay días que tampoco me siento bien... y esos días son los peores porque me hacen replanteármelo todo y buscar razones que justifiquen que este esfuerzo no merece la pena... pero tengo que recordarme una y otra vez que SÍ MERECE LA PENA, que poco a poco estoy consiguiendo mi propósito y que la felicidad es algo que tengo que ganarme semana tras semana, no por bajar más o menos kg, sino por ir aceptándome y queriéndome cada día un poco más...
No hay que perder la esperanza, hay que buscar la manera de mantener la ilusión con el cambio. El resto de pensamientos sobran porque lo único que hacen es estorbar y generar malestar...
Hay días que siento que lo llevo bien, hay días que me siento tranquila... pero hay otros días en los que el agobio me puede, que tengo demasiada ansiedad y que se me hace un nudo en la garganta que es imposible desatar y siempre acabo entre lágrimas...
Empecé este reto porque estaba harta de no sentirme feliz conmigo misma... ahora me doy cuenta que en el proceso hay días que tampoco me siento bien... y esos días son los peores porque me hacen replanteármelo todo y buscar razones que justifiquen que este esfuerzo no merece la pena... pero tengo que recordarme una y otra vez que SÍ MERECE LA PENA, que poco a poco estoy consiguiendo mi propósito y que la felicidad es algo que tengo que ganarme semana tras semana, no por bajar más o menos kg, sino por ir aceptándome y queriéndome cada día un poco más...
No hay que perder la esperanza, hay que buscar la manera de mantener la ilusión con el cambio. El resto de pensamientos sobran porque lo único que hacen es estorbar y generar malestar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario